Londres/EFE. - Michael Phelps, el mejor nadador de la historia, dijo ayer adiós en la piscina olímpica de Londres 2012, después de haber ganado en la capital británica cuatro medallas de oro y dos de plata.
El nadador nacido en Towson, en el condado de Baltimore (Maryland) hace 27 años, deja la capital británica con 22 preseas entre Atenas 2004, Pekín 2008 y Londres 2012, dieciocho de oro, dos de plata y dos de bronce. Ayer sumó su decimoctava medalla de oro, en los 4x100 relevos.
“No sé cómo poner en palabras lo que siento. Son veinte años. No sé dónde tengo ahora mis emociones, pero seguro que en los próximos días se asentarán”, dijo.
Phelps recibió acabada la jornada un trofeo de manos del presidente de la Federación Internacional de Natación (FINA), el uruguayo Julio Maglione, que le acredita como el mejor nadador olímpico de la historia.
Otra gran figura que dejó Londres en natación es el francés Yannick Agnel, que hizo sombra a los americanos con dos oros, en los 200 libre y en los 4x100 con una extraordinaria final que les dio el título a los galos.
Inolvidable será Sun Yang, el chino, a sus 20 años, es doble campeón olímpico en los 400 y 1.500 libre y récord mundial en la prueba más larga, plata en los 200 libre y bronce en el relevo 4x200.
Y el gran amigo de Phelps, Ryan Lochte, que se va de Londres con un palmares impresionante: dos oros, en los 400 estilos y el relevo 4x200 libre; dos platas, en los 4x100 libre y los 200 estilos; un bronce, en los 200 espalda.
