Tibás.-Pese a que solo disputó 29 partidos con Saprissa en los últimos ocho años, el exportero del club morado, Fausto González, asegura sentirse satisfecho y contento con la labor desempeñada durante su carrera deportiva.
El guardameta habló con Al Día sobre su retiro, su paso por la “S” y lo que viene en su vida.
- Fausto, ¿esperaba retirarse a los 33 años o fue la dirigencia la que se lo solicitó?
Es una decisión que venía manejando desde hace unos meses. Tomo con tranquilidad mi retiro, yo fui el que tomé la determinación. Siempre dije que quería retirarme en Saprissa y en esta temporada no fui tomado en cuenta como yo quería, por lo que siento que ya es hora de dejar ese espacio libre.
- Pero usted hace tres meses dijo en una entrevista a Al Día que quería retirarse en dos años. ¿Qué lo hizo cambiar de opinión?
Es difícil seguir cuando a uno no lo toman en cuenta, uno se tiene que dar su lugar y si estudié fue para algo. En Saprissa me tienen la confianza, a raíz de eso ellos también me propusieron ayudar en las labores legales, en la parte administrativa del equipo.
- ¿Cómo toma esta nueva etapa de su vida profesional?
Estoy muy contento porque puedo ayudar al club, en el campo en el que me desempeño.
- ¿Sus mejores recuerdos en el Deportivo Saprissa?
Tener seis títulos con el Saprissa, disputar competencias de infarto, jugar algunos partidos camino al Mundial de clubes. Lo mejor de haber estado ahí fue sentir el estadio cuando está lleno y apoyando. Lo otro son competiciones que van y vienen.
- ¿Un partido que lo haya marcado en su carrera?
El partido del tricampeonato de Saprissa (2008), el juego de la semifinal ante Monterrey y la final ante Pumas en el año 2005.
- Por mucho tiempo fue el tercer portero de Saprissa. ¿Le hubiera gustado tener más protagonismo en el club?
Jugué muchos partidos cuando Keylor Navas no estaba. Yo no evalúo el éxito por los partidos jugados, mi papel también era en función de liderazgo.
- ¿Su mejor amigo en fútbol?
José Francisco Porras. De ahí en adelante todos son compañeros.
