Una nueva historia en el fútbol nacional empezarán a escribir esta noche Herediano y Santos.
Por primera vez se enfrentarán en la disputa de un título y con antecedentes que los hacen, a los dos, desear la copa.
Cada uno con su historia, con sus antecedentes, pero con el mismo sueño. Son muchos años sin celebrar, sin sentir lo que es tocar la copa, dar la vuelta olímpica.
Hoy tienen la posibilidad de dar el primer paso, que muchas veces es el más importante, en procura de acercarse a ese tan añorado título que se les ha resistido en muchos años.
Los florenses disputarán su tercera final en los últimos cuatro torneos. En las dos anteriores la suerte de los penales les dio la espalda y se quedaron con las ganas del tan ansiado 22, ese que están esperando desde hace 19 años.
En este Verano, cuando todo parecía perdido, se metieron en semifinales y dieron el golpe ante el líder Pérez Zeledón que los hace ser favoritos en la final.
Claro, con la lección aprendida del torneo pasado cuando sacaron camisetas de campeón sin jugarse el segundo encuentro, ésta vez no quieren confianzas.
Herediano tiene un ataque de mucho peso con delanteros que marcan diferencia como Víctor Núñez, o jugadores inteligentes como José Cancela, pero ya lo dijeron: si no anotan, no vale de nada haber celebrado tantos goles en los 22 juegos pasados.
“Ahora es el momento en el que necesitamos que aparezcan los goles”, afirmó José Carlos Cancela, uno de los goleadores del equipo con ocho tantos.
Incluso Jorge “La Flecha” Barbosa, dice que “meten miedo”, aunque quizá del lado guapileño no piensen igual a él.
Una década después
Si los florenses han esperado tantos años para volver a saborear un cetro, en Guápiles sueñan con la primera vez, con esa que nunca se olvida.
Ya pasaron 10 años desde que disputaron su primera y única final en Primera División, aquella ante Alajuelense que perdieron con un global de 6-2.
No hay sobrevivientes de aquella serie, salvo Pablo Camacho, hoy entrenador de porteros, pero la consigna del grupo es poner al Santos en lo más alto del fútbol costarricense. Y creen estar para ser campeones.
“Si estamos aquí es por algo, es porque hemos merecido estar aquí. Ahora dicen que Santos es el débil de la final, pero se habla en la cancha, ahí lo hemos hecho nosotros”, mencionó Cristian Lagos, capitán y goleador del equipo, recordando que a los florenses ya los dejaron tendidos dos veces en este certamen, incluyendo un partido en Heredia.
“Tienen defensas de mucha experiencia, pero ya les hemos hecho daño. Sabemos lo que tenemos que hacer en el Rosabal Cordero y ojalá saquemos un buen resultado”, aseguró.
Todo está dicho, a partir de las ocho de esta noche en la ciudad de las flores, las palabras empiezan a sobrar y los sueños comienzan a volar, esperando hacerse realidad o diluirse en el aire.
Herediano y Santos arrancan la disputa de una final inédita, en la que cualquiera que salga vencedor, lo gritará al máximo y demostrará su total valía.
